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5 formas de salir del bloqueo productivo

Hay días que no. Días en los que no logramos ir ni hacia adelante para avanzar ni hacia atrás para rectificar. Algunos días nos atascamos, sin más. Los motivos de estos atascos productivos suelen ser el exceso de trabajo, la falta de concentración o la nada deseable combinación de ambos. Cuando llegamos un callejón sin salida, en primer lugar, hay que parar y replantear la estrategia de trabajo. Hay algunas acciones que podemos realizar para intentar desatascar la situación. En ocasiones, nuestra cabeza solo necesita algo de claridad, un hilo del que tirar o un simple cambio de aires.

Tiempo de lectura: 3 minutos

Hay días que no. En ocasiones, no logramos ir ni hacia adelante para avanzar ni hacia atrás para rectificar. Algunos días nos atascamos, sin más.

Los motivos de estos atascos productivos suelen ser el exceso de trabajo, la falta de concentración o la nada deseable combinación de ambos. Cuando llegamos un callejón sin salida, en primer lugar, hay que parar y replantear la estrategia de trabajo.

Hay algunas acciones que podemos realizar para intentar desatascar la situación. En ocasiones, nuestra cabeza solo necesita algo de claridad, un hilo del que tirar o un simple cambio de aires.

1. Elige la ruta correcta

Organizar desatasca. Quizá el bloqueo procedía de alguna cuestión que no estaba como debía estar. El orden físico a nuestro alrededor y la organización de nuestras tareas diarias son fundamentales para quedarnos atascados. Un buen entorno de trabajo y una hoja de ruta bien definida son claves para trabajar de forma efectiva.

Una buena práctica es preguntarnos con más frecuencia si hemos hecho la elección correcta de la tarea que haremos a continuación. ¿Es lo que debería estar haciendo en este momento? Hay momentos del día que son más adecuados para tareas que requieren cierto nivel de concentración y hay otros rincones del día que podemos emplear para acciones más mecánicas. Elegir bien en este sentido evita muchos bloqueos.

2. Da el primer paso

En ocasiones, solo necesitamos empezar con algo sencillo. Una vez en marcha, nos daremos cuenta de que no era para tanto. En ocasiones nos preocupamos sin motivo. Para encender la mecha de la productividad, basta con elegir una tarea sencilla, una que esté en nuestra lista de cosas que hacer.

Por eso es conveniente contar con un sistema de organización que nos permita tomar fácilmente las decisiones correctas entre un conjunto de tareas, filtrando por tiempo o por energía, según el momento del día. En este caso, para salir del bloqueo productivo, es mejor empezar con un trabajo que requiera poco y tiempo y poca energía.

3. Allana el camino

Cuando no hay forma de mover la gran roca, esa temible tarea que se nos resiste día tras día, lo mejor es allanar el camino y abrir otros frentes. A veces no podemos empezar con un determinado proyecto porque otras cuestiones de otras áreas de trabajo tampoco están en orden y ocupan nuestra mente. Son asuntos pendientes que no nos dejan avanzar en lo verdaderamente importante. Son pequeñas y molestas piedras en el camino, pero que una vez retiradas, seguramente permiten desbloquear la situación.

Cuando nada funciona, un buen plan es avanzar un poco es distintas tareas, pero de forma organizada y con un tiempo mínimo establecido. No se trata de picotear entre tareas de forma caótica. El objetivo es simplemente progresar en algo. Para ello podemos utilizar la técnica Pomodoro y trabajar en bloques de tiempo.

4. Haz un alto en el camino

Para y piensa. Este artículo que estás leyendo lo he escrito precisamente mientras salgo de un bloqueo productivo. Reflexionar ayuda y dejarlo por escrito mucho más. Pensar, escribir y aclarar. Podemos anotar qué sentimos en el momento del bloqueo, qué creemos que lo produce y, sobre todo, qué vamos a hacer para salir del callejón.

El hábito de escribir es muy recomendable precisamente para adelantarnos a los momentos en los que podemos bloquearnos y prepararnos para evitarlos. Mantener un diario para aclarar ideas es probablemente el método más eficaz.

5. Da un paseo

A veces, ante un problema, la solución aparentemente más sencilla es sin embargo la más efectiva. Si nos hemos quedado atascados en un asunto y no logramos avanzar, a veces solo hay que levantarse, dar un paseo y volver. Distraer la mente con otras cuestiones, cambiar de lugar y moverse son un buena para intentar salir de un bloqueo productivo.

Dicen los expertos que realizar tareas mecánicas y manuales facilita luego el trabajo intelectual; aseguran que sirve como desatascador. Trabaja por bloques de tiempo y descansa (levántate y anda) entre bloques. De nuevo, la técnica Pomodoro es la clave.

La cuestión es salir del círculo vicioso. Lo ilustraba perfectamente Álex Maese.

Fotografía | Bloqueo | Camino y dirección

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One Comment

  1. Juan Lague Juan Lague

    Nuevamente un excelente artículo, tu blog es uno de mis favoritos en cuanto a productividad personal.
    Gracias y saludos.

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