Press "Enter" to skip to content

Categoría: Tiempo

Cuando la hora importa

Tiempo de lectura: 2 minutos

Con este artículo, empiezo la serie de buenas prácticas para una comunicación digital más efectiva. En este decálogo trataré el exceso o la falta de comunicación, los canales inadecuados, las prioridades equivocadas, la duplicidad de la información o los tiempos incorrectos. Este último parece un buen punto de partida.

Un mensaje a deshoras puede tener un efecto inesperado. Una comunicación en un momento inoportuno podría no lograr su cometido, sobre todo si en el contenido viaja una petición. Pongámonos del otro lado: si recibimos un mensaje que conlleva cierto trabajo durante nuestro horario laboral, lo tomaremos como parte de nuestras obligaciones, aunque no nos haga especial ilusión. Si lo recibimos fuera del horario laboral, la cosa cambia y nuestra reacción será bien distinta.

Esta situación puede parecer una exageración, pero el tema no es menor. No en vano, hay expertos en comunicación que conocen muy bien la psicología que hay detrás del asunto y saben cómo aplicar las mejores estrategias para lograr una comunicación digital eficaz. Lógicamente, decidir qué información enviamos es fundamental. Acertar con el canal también lo es. Pero elegir el momento no es menos importante.

Shares

Cómo ahorrar tiempo (III): menos perfeccionismo y más velocidad

Tiempo de lectura: 3 minutos

Podemos aumentar nuestra productividad aplicando un buen método de organización. Seguramente, todos estemos de acuerdo sobre este tema, del que he hablado largo y tendido en este blog. Sin embargo, también podemos ahorrar mucho tiempo mejorando ligeramente algunas destrezas básicas o, simplemente, dejando de buscar la perfección.

En ocasiones, la clave para ganarle unos minutos al día es muy sencilla que, una vez puesta en práctica, seguramente nos preguntamos cómo no habíamos caído antes en ello. Son muchas las pequeñas cosas que podemos cambiar para ahorrar tiempo. Por ejemplo, escribir mejor y más rápido con el teclado o, simplemente, ser menos estrictos y perfeccionistas. Y ambas cosas se aprenden.

Esta la tercera entrega de la serie «Cómo ahorrar tiempo». Hasta ahora he compartido algunos consejos sobre:

5. Teclea mejor y más rápido

El tiempo es un recurso limitado y de gran valor. Por ello es fundamental aprender a ser más productivos en nuestro trabajo y aprovechar al máximo cada minuto del día. Una forma muy efectiva de lograrlo es aprendiendo a teclear más rápido y conocer algunos atajos de teclado. Es tan sencillo como eso.

Para empezar, debemos saber que hay una forma correcta de colocar los dedos sobre el teclado. La posición correcta de los dedos es crucial para maximizar la velocidad y precisión al teclear. Para ello, debemos colocar los dedos índices sobre las teclas F y J del teclado y el resto de los dedos deben reposar sobre las teclas adyacentes. Una vez que tengamos esta posición correcta, solo es cuestión de práctica y velocidad.

Shares

Profesores, agendas y tareas

Tiempo de lectura: 4 minutos

El profesor y su agenda son inseparables. Su relación es especial. El ritual de cada año de dar con la agenda perfecta también lo es. Pero nunca se adaptan exactamente a lo que necesitamos, ¿verdad?. ¿Cómo es posible que nadie haya diseñado todavía la agenda ideal?

Todo el mundo necesita anotar las citas o eventos en algún sitio, pero hago mención especial al docente porque este es el tercer artículo de la serie de miniconsejos para empezar el curso bien organizado.

Como profesores registramos muchos eventos durante el curso; nuestro calendario se llena ya en septiembre de clases, reuniones, jornadas, juntas de evaluación, charlas y días especiales. Es un trabajo en parte dirigido por el calendario y durante la jornada realmente hay muy pocos momentos (o ninguno) disponibles para poder adelantar trabajo. De agendas, tareas y «gestión del tiempo», aquí van algunos consejos:

Digitaliza tu agenda

No hablo de escanear tu agenda, sino de utilizar una herramienta digital para organizar el curso. Créeme, son todo ventajas. Seguramente sientas un apego especial por tu agenda. Probablemente compras (o te regalan) el mismo modelo todos los años, o quizá eres un innovador y exploras distintas alternativas cada curso. El papel está muy bien, no digo lo contrario, pero las herramientas digitales para la gestión del calendario son mucho más efectivas.

Shares

Cómo ahorrar tiempo (II): tu hora productiva y el consumo de televisión

Tiempo de lectura: 2 minutos

Una de las formas de liberar tiempo para proyectos personales (como escribir este artículo) o simplemente no hacer nada y descansar (como haré luego) es tratar de ahorrar algunas horas a la semana en ciertas tareas.

Escribí sobre este tema en un primer artículo sobre cómo ahorrar tiempo. En él, comentaba la importancia de dosificar y planificar el acceso a redes sociales y, en general, cómo limitar el uso del teléfono móvil.

En esta ocasión, continúo la serie con dos nuevas ideas clave: las horas productivas por la mañana y el consumo responsable de televisión.

3. Madruga y encuentra tus horas productivas

Cada uno tiene sus rutinas de trabajo. Hay quien trabaja mejor por la mañana, bien temprano, y otros prefieren hacerlo por la noche. En este punto entran en juego muchos factores, sobre todo nuestro horario laboral (el oficial, porque siempre surgen imprevistos). En general, la gran mayoría de las personas tienen un trabajo de día, y en este caso creo que madrugar siempre es una buena idea.

Shares

Cómo ahorrar tiempo (I): el teléfono móvil y las redes sociales

Tiempo de lectura: 5 minutos

Si tuviera que dar una única definición de productividad diría que ser productivo es realizar con efectividad las tareas de cualquier ámbito de responsabilidad para disponer de tiempo libre para proyectos personales y familiares. Seguramente no es la definición más canónica del término productividad, pero una explicación que no tiene en cuenta una recompensa en horas libres creo que no es una buena definición. En el último artículo de este blog daba algunas pistas sobre lo que es y lo que no es ser productivo.

Para este noble propósito, el fin a veces justifica los medios, siempre que no perjudiquen a nadie, claro está. Al menos debemos poner todo nuestro empeño (y medios) para alcanzar el objetivo último: ahorrar tiempo.

Uno de las formas de liberar tiempo para proyectos personales (como escribir este artículo) o simplemente no hacer nada y descansar (como haré luego) es tratar de ahorrar algunas horas a la semana en ciertas tareas. Hace tiempo compartí en el blog 19 trucos productivos para sacarle minutos al día, porque en realidad sí hay tiempo; solo se trata de decidir con criterio en qué lo utilizamos y también aplicar algunos sencillos trucos.

El reto de ahorrar tiempo

En los últimos años he dejado de hacer propósitos de año nuevo porque creo que cualquier momento es bueno para empezar con nuevos hábitos. En realidad, siempre hay un momento del año más adecuado que otro para empezar ciertos hábitos. El 1 de enero desde luego no lo es para muchos propósitos, ya sabemos cuáles.

Sin embargo, este año me gustaría seguir ahorrando tiempo en ciertas tareas; por aquello de ser más «productivo». En este primer artículo (porque esto tiene pinta de serie) me centro en el aspecto más tecnológico, en general el uso del teléfono móvil y en particular la participación en redes sociales y profesionales. No cabe duda de que algunas comunidades son una verdadera mina y un recurso de aprendizaje que, literalmente, no tiene precio. No solo algunos recursos tienen un valor incalculable, sino que muchos usuarios comparten su conocimiento y experiencia de forma altruista. También quiero seguir poniendo mi granito de arena en ello, con este blog y en redes. Sin embargo, en este proceso veo todavía la necesidad de mejorar algunos aspectos, sobre todo para ahorrar tiempo.

Shares